22 Ene Contaminación Lumínica.
Descarga este Artículo¿Alguna vez te has preguntado por qué cuando miras al cielo de noche desde tu ciudad, te cuesta distinguir a primera vista las estrellas? ¿Has notado que el cielo no es negro, sino que es particularmente más claro?
Bueno eso se debe a la gran cantidad de iluminación que hay a tu alrededor. El alumbrado público, los letreros publicitarios y un sinfín de fuentes luminosas, impiden que puedas disfrutar de un espectáculo tan maravilloso como es el cielo estrellado. Y no sólo te pasa a ti, sino que también a los astrónomos que, a pesar de poseer enormes telescopios, la excesiva luminosidad dificulta las observaciones del firmamento y sus cuerpos celestes. A lo anterior se le conoce con el nombre de contaminación lumínica o luminosa. Este problema ha obligado a muchos países a legislar para disminuir la cantidad de luz que se proyecta hacia el cielo.
¿Qué es la contaminación lumínica?
La contaminación lumínica “es toda aquella luz que no es aprovechada para iluminar el suelo y las construcciones. Esto puede suceder por dos razones principales: porque el haz luminoso no es dirigido hacia abajo, o porque la radiación luminosa es de una longitud de onda que el ojo humano no percibe. La luz que escapa rumbo al cielo es dispersada hacia el haz del telescopio por moléculas o polvo. Existe una multitud de caminos por los cuales la luz puede dispersarse por la línea de visión, sin que necesariamente haya una ciudad directamente visible desde el observatorio. Por lo tanto, la única manera de controlar la contaminación lumínica es reducir la cantidad de luz que escapa hacia el cielo”.
El resplandor, provocado por la luz que se escapa de las luminarias exteriores, genera un aumento del brillo del fondo natural del cielo. Esto disminuye el contraste e impide visualizar los objetos con un brillo similar o inferior al del fondo.
¿Quiénes contaminan?
La contaminación lumínica es producida por los sistemas de iluminación artificial destinados al alumbrado de calles, edificios, monumentos y avisos publicitarios. La única manera de controlar la contaminación lumínica es reducir la cantidad de luz que escapa hacia el cielo. El diseño de las lámparas permite que más del 30% del flujo luminoso que emiten, llegue directamente al cielo provocando un gasto energético y económico injustificado.
Efectos Los efectos que producen la contaminación lumínica aún no cuentan con suficientes estudios que puedan identificar la real magnitud de este problema. El efecto más evidente es la iluminación artificial del cielo nocturno. Piensa los daños que se están provocando al no utilizar de manera racional los sistemas de iluminación artificial.