17 Feb Manejo a la defensiva
Descarga este ArtículoEl manejo a la defensiva es una técnica que consiste en conducir de manera preventiva, anticipándose a los posibles peligros y situaciones imprevistas. No se trata solo de cuidar tu propio comportamiento al volante, sino también estar alerta a las acciones de otros conductores, peatones y condiciones del entorno.
Importancia de mantener una distancia segura
Mantener una distancia adecuada con el vehículo que va delante de ti es crucial para evitar colisiones por frenado brusco. La regla general es de al menos dos segundos, y más si las condiciones climáticas o del camino lo requieren. A continuación, enlistamos recomendaciones para evitar incidentes.
Atención a los factores externos
El clima (lluvia, niebla, etc.) y las condiciones del camino pueden afectar la visibilidad y el agarre de los neumáticos. Siempre adapta tu velocidad y mantén una mayor distancia de seguridad en estos casos.
Anticiparse a los movimientos de otros conductores
No confíes completamente en que otros conductores sigan las reglas de tránsito. Siempre mantente alerta a sus movimientos. Por ejemplo, al acercarte a un cruce, observa si otros vehículos están acelerando o frenando.
Uso adecuado de los espejos y señales
Revisa constantemente los espejos retrovisores y laterales. Utiliza las señales de giro con anticipación para que los demás conductores puedan prever tus movimientos y reaccionar a tiempo.
Evitar distracciones
El uso del teléfono móvil, ajustar el GPS o incluso comer mientras conduces son distracciones que pueden tener consecuencias graves. Mantén toda tu atención en la carretera.
Velocidad apropiada
Conducir a una velocidad adecuada no solo te ayuda a reaccionar mejor ante imprevistos, sino que también te permite cumplir con las normas de tránsito y respetar las condiciones de la vía.
Reacción ante un riesgo Si enfrentas una situación peligrosa (como un vehículo que cambia de carril sin señalizar o un peatón que cruza inesperadamente), es vital mantener la calma y tomar decisiones con rapidez, pero sin perder el control del vehículo.
Revisión y mantenimiento del vehículo
Un vehículo en buen estado es clave para la seguridad. Revisa regularmente los frenos, las luces, los neumáticos y otros elementos esenciales.



